Edgar Costa, capitán del Marítimo, denunció que llegó a ser objeto de un intento de soborno para que su equipo perdiera un partido contra el Benfica. El delantero denunció que el empresario Miguel Pinho intentó persuadirlo para que cediera en un encuentro de la Primeira Liga de Portugal, según reveló el rotativo luso Expresso.
Pinho, quien negó las acusaciones al semanario, es el representante de los internacionales portugueses Bruno Fernandes (Manchester United) y Nuno Mendes (PSG). La denuncia se habría producido en una reunión en 2019, con una fiscal encargada de una investigación relacionada con sospechas de corrupción del Benfica; tal como reseña Efe.
Costa afirmó que recibió una llamada telefónica de un empresario, quien lo invitó a un hotel de Funchal; la ciudad donde juega el Marítimo, y que accedió porque pensó que se trataba de una oportunidad profesional. Cuando llegó al hotel, la misma persona que lo invitó lo llevó a una habitación, donde se encontraba otro individuo.
¿Posible caso de amaño?
Ambos le aseguraron «que estaban allí en nombre del Benfica». Le ofrecieron 30.000 euros si «estaba dispuesto a jugar mal y no tirar a puerta» en el partido contra las Águilas. Además, le prometieron un nuevo y mejor contrato en un club no precisado, Sin embargo, el futbolista lo rechazó porque quería seguir siendo «un hombre libre».
Este medio también revela que Edgar Costa fue uno de los dos jugadores del Marítimo que participaron -de forma anónima- en otro reportaje del canal de televisión SIC (2018), sobre presunta corrupción relacionada con el Benfica.
Para ese entonces, el delantero (35 años) y otro colega no identificado revelaron que personas; presuntamente vinculadas al cuadro lisboeta, les ofrecieron 40.000 euros para perder un partido contra dicho club, en la penúltima fecha del curso 2015/16. El Benfica ganó aquel partido por 0-2. En la siguiente jornada conquistó el campeonato.