En su debut para el Mundial de Catar 2022, contra Japón, el equipo titular de Alemania posó con la mano tapándose la boca. Se trata de una señal de protesta en contra de la FIFA, que ha impedido a los capitanes de las selecciones llevar un brazalete de no discriminación, en apoyo a la comunidad LGBTQI+.
Los futbolistas de Alemania protagonizaron este gesto a modo de protesta, en medio de los rumores de que Manuel Nauer, su portero y capitán, llevaría el brazalete arcoíris. Previamente, el segundo asistente del cuerpo arbitral acudió a comprobar el brazalete que lucía el portero del Bayern de Múnich.
Polémica con el brazalete antidiscriminación
La FIFA había advertido que sancionaría a los jugadores que mostraran el brazalete propuesto por la asociación «One Love». Esto, como protesta por la situación de los derechos humanos en Catar, en particular de la comunidad LGBTQI+.
Sin embargo, esta decisión le valió duras críticas a Gianni Infantino, presidente de la FIFA. Una muestra de esto es que Nancy Feaser, ministra del Interior de Alemania, se situó en el palco de autoridades del partido, que se disputó en el estadio Internacilnal Khalifa, con el brazalete de «One Love».
Por su parte, Jesper Moller, presidente de la Federación Danesa de Fútbol, aseguró que no votará por Infantino en las elecciones al frente de la FIFA. «Estamos ante una situación extraordinaria. No solo estoy decepcionado, estoy enfadado. Vamos a pedir una clarificación jurídica tras esta serie de presiones», indicó.
Todo lo contrario a Noel Le Graet, su colega de la Federación Francesa de Fútbol, quien aseguró alienarse en la posición de la FIFA. «Somos 32 equipos de continentes, culturas y religiones diferentes, con problemas diferentes. Estimo que está bien que la FIFA haya decidido que todo el mundo lleve el mismo brazalete», dijo.
Con información de Efe