Sin duda alguna que el Paris Saint-Germain (PSG) tiene una de las plantillas más espectaculares de Europa. Además de contar con una delantera de ensueño, conformada por Lionel Messi, Neymar Jr. y Kylian Mbappé; se da el lujo de contar con dos elementos de primer nivel en la portería, como lo son Gianluigi Donnarumma y Keylor Navas.
A pesar de que Donnarumma es más joven y viene de ser el Jugador Más Valioso de la Eurocopa que ganó con Italia, el técnico Mauricio Pochettino se ha decantado por la experiencia de Keylor Navas, quien ganó tres Champions consecutivas con el Real Madrid. Esto ha causado una pequeña rivalidad en el arco parisino.
«Sabía que al llegar iba a existir esa competencia, que no ha sido agradable. No sé qué piensa él al respecto; pero, para mí, todo está bien, sobre todo porque todos me demuestran que soy importante. Lo daré todo por el PSG», dijo Donnarumma a la Gazzetta dello Sport. «No es cierto que haya problemas con Keylor. Tengo una muy buena relación con él, es un buen tipo. Para mí, no hay ningún problema», añadió Donnarumma.
En este sentido, comentó que la competencia interna no ha permitido relajarse, sobre todo por el nivel que ha demostrado el costarricense. «Creo que a los dos nos gusta jugar siempre para ayudar al equipo. Hay que ganarse el puesto cada día. Hay que hacer que el entrenador se fije en nosotros para jugar», declaró sobre el día a día en el club.
El portero italiano también dio sus puntos de vista sobre la eliminatoria que se aproxima en los octavos de final de la Champions League: «Con el Real Madrid será un partido difícil, pero podemos luchar y ganar. Jugar mi primera Champions, aquí, es algo único; y es normal que haya expectativa con nosotros. Hay que enfocar cada partido de forma correcta».
Keylor Navas sobre Donnarumma
Keylor Navas, por su parte, declaró a finales de enero que en ningún momento habló de una mala relación con Donnarumma, pese a la insistencia de algunos medios de comunicación: «Siempre es bueno tener competencia; pero creo que, a nivel personal, no es agradable estar en esta situación. Creo que a los dos nos gusta jugar siempre, para ayudar al equipo. Hay que intentar ganarse el puesto cada día, trabajar y hacer que el entrenador se fije en nosotros para jugar más».