Irregular; de esta forma se podría describir el primer tramo del curso para el Bayern de Múnich. Mientras viene de conseguir la Supercopa de Alemania y llevar puntaje ideal en las dos primeras jornadas de la fase de grupos de la Champions League, en la Bundesliga suma cuatro partidos consecutivos sin conocer el triunfo.
Esto podría derivar en dos razones: la primera apunta a una falta de intensidad en los últimos partido del campeonato doméstico. El segundo podría derivarse en la ausencia de un centrodelantero. Y es que, a pesar de que domina los partidos, sufre por falta de contundencia por la marcha de Robert Lewandowski.
Antes del partido de Champions contra el Barcelona, Thomas Müller admitió que, inconscientemente, puede que la plantilla carezca de intensidad cuando se trata de un rival de menor importancia. En cambio, frente a equipos como Inter de Milán o Barcelona, es posible que los jugadores den lo máximo en la cancha.
El Bayern empezó goleando
Tras la derrota del pasado fin de semana contra el Augsburgo, Oliver Kahn, presidente del Consejo Directivo del Bayern, consideró que todo se resumía en una consecuencia indirecta de las goleadas en los primeros partidos de la campaña. El Bayern derrotó 5-3 al Leipzig en la Supercopa de Alemania; mientras que en las tres primeras fechas de la Bundesliga superó al Eintracht Frankfurt (1-6), Wolfsburgo (0-2) y Bochum (0-7).
«Al comienzo de la temporada todo parecía fácil. Tal vez algunos pensaron que se podían resolver los partidos de la Bundesliga a media marcha, pero ese no es el caso», declaró el exportero en una conferencia de prensa. Según sus palabras, los goles han dejado de llegar por la «falta de contundencia en los últimos metros».
Esto se puede interpretar en la ausencia de Lewandowski; así que el equipo muniqués optó por prescindir de un centrodelantero cuando se concretó la marcha del artillero polaco al Barca; apostando por modificar el sistema. Además, de acuerdo con el DT Julian Nagelsmann tampoco había un ariete accesible dentro del mercado.
Escrito por Manuel Alejandro Ramírez | @manuramirez95